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35 A comienzos de la década de los sesenta, el Plan Auquénido -promovido por la Junta de Adelanto en convenio con la Universidad de Chile- modifica las técnicas y manejo tradicionales ganaderos con el fin de “transformar la ganadería del altiplano, considerada rudimentaria y desaprovechada” (Galdames, L. y Ruz, R., op. cit., p. 380). De este modo, instalan la “Estación Zootécnica de Misitune” en el altiplano la cual, luego de cinco años, deja de funcionar sin llevar a cabo los siguientes objetivos propuestos en sus inicios: 1. Aumento de la masa ganadera existente actualmente en el altiplano, en un plazo de diez años; 2. Duplicar la actual producción de lana por animal; 3. Mejoramiento de la lana en sus aspectos de finura, uniformidad, elasticidad, etc.; 4. Fijación del tipo zootécnico de las distintas especies y variedades de auquénidos, a fin de abrir un registro genealógico; 5. Aprovechamiento industrial en la zona de la lana, cuero y carne de estos animales; 6. Investigación científica sobre problemas biológicos y ecológicos de los auquénidos que hoy se desconocen totalmente; 7. Introducción de nuevas especies zoológicas en el altiplano con fines industriales como las ovejas “karakules”, conejo angora y mejor aprovechamiento de la chinchilla y la vicuña; 8. Experiencias forrajeras con el fin de adaptar semillas de altura y llegar a la formación de praderas artificiales con la cual se podrá aumentar, en el futuro, la actual densidad ganadera; 9. Creación de un mercado comprador de lanas con amplia influencia sobre el altiplano (Quiroz, D., Díaz, A., Galdames L. y Ruz, R., 2011, pp. 157-168). El Plan para el Desarrollo Agropecuario funcionó entre 1961 y 196718, siendo su principal preocupación dar mejor uso a los cursos de agua, aprovechando este recurso para el riego. Hasta fines de la década del 60, los planes sociales implementados a través de la Consejería de Promoción Popular y que contemplaban “centros de madres, juntas de vecinos, cooperativas, formación de líderes y dirigentes juveniles (...) programas de asistencia técnica y económica (créditos) a través del Instituto de Desarrollo Agropecuario, la Corporación de Reforma Agraria, el Servicio Agrícola y Ganadero, la Corporación de Fomento de la Producción” (Tudela, P., 2002, p. 26), promueven el desarrollo en la región, aunque no ponen el foco especialmente en los avances dentro del ámbito agrícola y ganadero. Aún en menor medida es considerada la dimensión étnica de las comunidades del interior, su estilo de vida y cosmovisión. En cambio, los impulsos sociales tienen carácter etnocéntrico, eurocéntrico, urbano y de mercado. Para el año setenta, don Germán cuenta que no estaba inscrito en los registros electorales. “Todo el mundo decía que había que votar por Allende, pero yo no votaba”. Es recién con el presidente de la Unidad Popular que la deuda con los pueblos originarios es reconocida y dialogada19, aun cuando la perspectiva de desarrollo continúa por la misma senda que en los gobiernos anteriores. La Comisión de Desarrollo del Interior (1972 - 1976), creada dentro del Plan Andino, luego del golpe militar releva el carácter geopolítico de la zona como elemento estratégico en la defensa de las fronteras del territorio nacional. 18. Entre los gobiernos de Alessandri Rodríguez y de Frei Montalva. 19. El 26 de septiembre de 1972 es promulgada la Ley Nº 17.729. Esta ley reconoce la pluralidad cultural dentro del Estado-Nación, pone fin a la división de tierras y, en cambio, hace énfasis en lo comunitario a través del trabajo con cooperativas indígenas. Dicha ley no llegó a materializar logros significativos debido a la intervención militar de 1973.

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