En una nueva versión de la Exposición Universal que se realizará el próximo año en Italia, el sector silvoagropecuario tendrá un rol protagónico en lo que será el pabellón chileno dedicado a mostrar al planeta las bondades de la geografía, la gente y la agricultura nacional.
“El amor de Chile” es el nombre que tendrá el pabellón del país en la Expo Milán 2015, evento internacional que se desarrollará entre el 1 de mayo y el 31 de octubre del próximo año y que reunirá a 147 países, en una exposición global bajo el lema “Alimentar el planeta, energía para la vida”.
Detrás de la participación de Chile en esta exposición se encuentran instituciones como el Ministerio de Relaciones Exteriores, la Dirección General de Relaciones Económicas Internacionales (Direcon), ProChile, el Ministerio de Agricultura y la Secretaría Ejecutiva del proyecto.
En entrevista con el programa radial Chile Rural producido por Fucoa, el comisionado general de Chile para Expo Milán 2015, Lorenzo Constans, comenta que “el nombre del pabellón nace de un poema de Raúl Zurita, que habla mucho de las virtudes del país y que tiene que ver con los objetivos que buscamos en la participación de Chile. Este es un proyecto país. ‘El amor de Chile’ significa el cariño que nuestros productores ponen al servicio de los alimentos. En ello la presencia de las regiones es fundamental, pues, tal como ha destacado el ministro de Agricultura, es importante destacar el trabajo de la familia campesina, que están tras los productos que llegan a nuestros mercados pero que también forman una cadena de afectos. Nuestra intención es mostrar esto a través de gastronomía, productos e imágenes”.
Agrega que la exposición permitirá mostrar que “Chile tiene características únicas. Nuestras barreras fitosanitarias naturales, como la cordillera, el mar, el desierto en el norte y los hielos patagónicos del sur, permiten que haya sectores con climas especiales que permiten exportar productos de gran calidad y variedad. Chile es conocido por el vino y la fruta, por ejemplo, y ello hay que integrarlo con nuestra gastronomía, otros productos como el atún de Isla de Pascua, la centolla, etcétera. Lo que queremos es que estas bondades se mezclen y que los visitantes del pabellón conozcan el país, degusten y disfruten de las delicias de Chile. Mi objetivo final es que cuando el visitante salga de la exposición, diga: tengo que ir a Chile”.
A través una innovadora y dinámica puesta en escena, a cargo de profesionales y creativos chilenos, el pabellón, con una capacidad simultánea para 200 personas, dos plantas y seis “momentos” o presentaciones, ofrecerá un recorrido donde se exhibirá una serie de imágenes y animaciones de diversos paisajes característicos de la geografía y cultura chilena, teniendo como eje central mostrar la actividad silvoagropecuaria desde el campo a la mesa de los chilenos y extranjeros, valorizando así toda la cadena productiva, sus protagonistas y la grandeza de la agricultura y cocina de Chile.
